Compartir:
TweetLos sabuesos del marketing ya están observando a un segmento de la población, que crece a ritmo sostenido, y que empieza a perfilarse como un nuevo tipo de consumidor. Son los seniors o mayores de 65 años, quienes presentan una gran oportunidad para que sus necesidades específicas puedan ser satisfechas por el comercio.
En nuestro país, se espera que para el año 2020 el 22% de los chilenos tenga más 65 años. A esa fecha, más de un quinto de la población estará ya “entrada en años”, ad portas de jubilar y tendrá todavía tiempo y energía para demandar distintos productos y servicios, tanto online como en el mundo real.
Requieres de artículos que les brinden mayor seguridad para mantenerse vigentes, facilitarse la vida y no perder movilidad.
Están abiertos a invertir tiempo y recursos en mantener un buen estado físico y mental.
Si ya han pasado a retiro, cuentan con más tiempo para realizar algunas actividades postergadas como viajes o participar en clubes y sociedades. Muchos de ellos se han subido al comercio online y compran en sitios internacionales que despachan a cualquier parte del mundo.
Es evidente que se ha desarrollado y ampliado la oferta de bienes y servicios para los mayores. Desde calcetines antideslizantes para evitar caídas, barras para la ducha, controles remoto con teclas XL o servicios como clases de gimnasia o clases de computación. Hay tiendas especializadas, tanto físicas como virtuales.
Existen restaurantes que tienen cartas con letras más grandes o productos que han incluido una rotulación también con una tipografía más legible. Hay productos alimentarios formulados especialmente para sus necesidades nutricionales.
La industria -tanto nacional como extranjera- se ha ido enfocando en satisfacer los requerimientos de los adultos mayores, en un planeta que envejece.